El Gobierno intenta convertirnos en culpables en vez de en víctimas
En el mesón Maraka's, Tanja Nijmeijer se levanta de la mesa para despedirse, con un nuevo cigarrillo en la mano. Es martes por la noche, y en su rostro se dibuja una expresión atormentada, la misma que ha mostrado durante las dos últimas horas, igual que ocurrió el lunes durante las seis horas de nuestra conversación.
Comentarios
Publicar un comentario