Comúnmente muchas personas son influenciadas por su entorno para elegir la preparación que promoverá el trabajo de sus sueños, es por ello que se deben tomar en cuenta muchos factores antes de tomar esta decisión como: las experiencias en ese campo laboral, las cualidades rutinarias y las características sobre las ventajas y desventajas de ese trabajo que afectarán la satisfacción que esperan sin estar enfocados solo en el sustento.
Sin embargo al invertir tiempo, costo, esfuerzo y dedicación para lograr el contrato soñado se encuentran con decepciones inesperadas al constatar una inconformidad sobre el verdadero desempeño del cargo, las cuales se deben superar para aprovechar la experiencia, los estudios, las habilidades y contactos obtenidos, como base hacia el logro del éxito emocional y profesional.
Hoy en día existen muchas posibilidades de que los objetivos profesionales cambien de nuestra vida de estudiantes al momento de ejercer, en las horas laborales puede que no nos sintamos cómodos o a gusto pero no por ello quiere decir que hemos fracasado solo debemos verlo como que tenemos las oportunidades de saber escoger y decidir en realidad que es lo que nos gusta en el ámbito laboral para trabajar con satisfacción y a la misma vez recibir nuestra remuneración económica.
Y si nos damos cuenta que no estamos cómodos igual debemos mantenernos para desarrollar mas habilidades y definir en que campo laboral nos gusta estar, y no renunciar de una vez sin tener algo claro porque si no sabemos en que desempeñarnos siempre estaríamos en una inestabilidad probando que nos gusta y así pasarían y renunciaríamos a muchos empleos.
Criollo M. Oskarly R. Diaz R. Andrea N. Perez F. Wilkin Y. Rey V. Maria G. Valbuena A. Luis A. Villate M. Emelly M.
Sin duda, esta es la realidad que viven muchas personas, quienes no se sienten contentos con su trabajo así estén en la rama que escogieron y en la cual se han especializado universitariamente y al ejercerla profesionalmente descubren simplemente que no les gusta. Confucio dijo: "Si amas lo que haces, nunca será un trabajo" y esa debería ser la constante de todos, pero si llegamos al trabajo soñado y resulta ser un fracaso que podemos hacer? Lo que nos enseña Caroline Winegeart en su vivencia es que hay que buscar el lado beneficioso de esta decepción ; fortalecernos y ver de qué manera ese trabajo en el que estamos se puede convertir en un escalón para encontrar algo donde nos sintamos plenos; o bien, empezar a agradecer la oportunidad que se tiene en ese momento, y no abandonar rápidamente esa carrera que se esfuma, sino desarrollar más habilidades que serán parte de nuestras experiencias para un futuro.
Un tema familiar para muchos y de gran importancia hoy en día, ya que estamos hablando del grado de conformidad que se tiene con el trabajo soñado. Se puede tener el trabajo soñado, pero a su vez influyen una infinidad de factores que pueden decepcionarte del mismo, como por ejemplo: ¿realmente le apasiona?, impera un buen clima laboral, puede innovar y aportar nuevas ideas, la empresa valora y destaca sus logros, existe una buena remuneración, líderes que motivan, posibilidades de ascenso y muchos más.
Se tiene el trabajo soñado pero a su vez se siente infeliz e inconforme con el, lo consideran una carga y un deber que cumplir sin mayores motivaciones. Estos sucede principalmente por la ausencia de los factores anteriormente nombrados. El desempeño de los empleados es fundamental para lograr día a día las metas de la organización, ya que ellos son el principal elemento de la empresa. Alguien que no se sienta a gusto en su empresa buscará ese trabajo soñado en otra que le brinde la satisfacción necesaria de la cual dependerá su productividad en ella. Sin embargo la satisfacción laboral no es sólo responsabilidad de la empresa, también va a depender de la participación activa del trabajador, su buena relación con sus compañeros y buena disposición.
La mayoría de las personas desde que son muy jóvenes piensan en el trabajo que más le gustaría desempeñar, ya sea porque les dan buenos beneficios o por su satisfacción emocional, sin saber que al momento de ejecutar el trabajo puedan o no encontrar lo esperado o anhelado, sin embargo hoy en día ciertas decisiones nos lleva a lugares equivocados a tal punto de sentir el estrés y la carga del trabajo, frecuentemente realizándolo sin preocuparnos por el desempeño sino pensando en agilizar cada cosa para salir de nuestra actividad, dándonos cuenta de que esa actividad no nos llevará a ningún lado. Pero la mejor opción no es salir corriendo y no volver más, o levantarse al día siguiente y decir no voy a trabajar hoy porque simplemente no me gusta, lo mejor es tomarse unos días para pensar y reflexionar que fue lo que paso, y que se debe hacer ahora, observando detenidamente en que fallamos, en que nos equivocamos, enfrentar la realidad y aprovechar al máximo nuestras habilidades, preguntarnos siempre hacia dónde queremos ir y qué es lo que realmente debemos hacer. Como dice el artículo: “los fracasos inesperados pueden ser beneficiosos si sacuden a la gente y les llevan a pensar de forma distinta”.
González L., Noreska Y. C.I. V.- 25.703.416 Hernández R., Danaris Y. C.I. V.- 21.419.018 Millán R., Anna C. C.I. V.- 24.745.636 Ron G. Leyda G. C.I. V.- 15.242.649 Toloza B., Yosel A. C.I. V.- 24.355.149 Velásquez G., Wladimir E. C.I. V.- 24.693.533
Aunque resulte extraordinario, esto ocurre con más frecuencia de lo que pensamos. Hoy a muchos jóvenes les inculcan la idea del "trabajo de sus sueños". Cada vez más gente espera encontrar un empleo que no sólo le ayude a ganarse la vida, sino que suponga un estímulo y cubra algunos aspectos emocionales.
Para convertir un empleo que ha resultado un sueño frustrado en un triunfo hay que vencer la decepción, ver dónde nos hemos equivocado y sacar el máximo partido a nuestras habilidades. "Una buena estrategia es preguntarse hacia dónde queremos ir sin tener que plantearnos un giro radical", señala Helene Lollis, presidenta de la consultora Pathbuilders. El cambio inteligente Eso implica, incluso, aprovechar nuestro actual trabajo para desarrollar nuestras capacidades y contactos que pueden ayudarnos a encontrar otro puesto. A Winegeart siempre le gustó utilizar las redes sociales, así que hizo que se convirtieran en un aspecto fundamental de su actividad. Esto le ayudó a encontrar un nuevo empleo que consistía en crear un departamento de redes sociales en una agencia más pequeña. Su experiencia le llevó, años después, a dejar el mundo de la publicidad y a convertirse en directora de operaciones de IWearYourShirt.com, una empresa de márketing. Ahora Winegeart dirige su propio negocio de diseño web, MadeVibrant.com. Los fracasos inesperados pueden ser beneficiosos cuando nos inducen a modificar nuestra forma de pensar, según un estudio de la publicación Social Psychology. Ashley Stahl dedicó toda su formación a prepararse para el trabajo de sus sueños: la seguridad nacional. Se licenció en relaciones internacionales, aprendió árabe y se trasladó a Washington, donde realizó más de 90 pruebas. A los 23 años, consiguió un empleo con un contratista de defensa para dirigir un programa para el Pentágono: "Estaba emocionada con esta oportunidad; me parecía increíble, un sueño hecho realidad".
Esta situación es contemplada más veces de las que un ser humano se pueda imaginar, desde jóvenes con frecuencia ocurre, que la familia o personas cercanas inculquen pensamientos de cómo debe ser el trabajo de su sueños, muchas veces lo hacen pensando en la remuneración obtenida por el mismo y otras por cubrir aspectos emocionales. ¿Ahora bien, que sucede cuando este sueño no es la realidad que se ha venido gestando? Existen muchas expectativas al responder esta interrogante, pero la más adecuada seria la insatisfacción que surge cuando no se cumplen las expectativas sobre lo deseado, con tan anhelado trabajo. Sin embargo se puede convertir este fracaso en una oportunidad, siempre y cuando se acepte la realidad que se está viviendo, y empiece a desarrollar las capacidades que se tienen como ser humano, adaptándolas a las tareas asignadas en el trabajo, esto genera tranquilidad y seguridad, de que las cosas que se están realizando se cumplan dentro de los parámetros establecidos, trayendo como resultado un entorno favorable en el ámbito laboral y a su vez satisfacción personal.
Hay quien espera encontrar un trabajo que suponga un estímulo y cubra algunos aspectos emocionales, pero incluso tener “el trabajo de sus sueños” puede decepcionar a muchas personas, ya que se sienten abrumadas por la cantidad de tiempo que deben dedicarle a dicho trabajo y les consume emocionalmente, al verse atrapados en un sinfín de responsabilidades y ver reducido su tiempo para dedicarle a cosas personales. Pero antes de tomar una decisión arriesgada, como lo es salir corriendo y dejar tirado el trabajo sin mirar atrás, se puede tomar las cosas son clama y mirar que aspectos se pueden mejorar para reinventar el trabajo y así enriquecer el tiempo que se le dedica y recuperar tiempo y espacio para realizar actividades que le llenen emocionalmente, el equilibrio entre la vida personal y laboral. Si decide retirarse del trabajo, debe aprovechar el trabajo actual para desarrollar aptitudes y capacidades que puedan ser fundamentales en un nuevo puesto de trabajo, hacer una lista de pros y contras de todas las características que afectarán su felicidad, que el fracaso le sirva de experiencia para mejorar aspectos negativos y resaltar los positivos.
Comúnmente deseamos encontrar el trabajo de nuestros sueños, que nos proporciona estabilidad, prestigio experiencias y conocimiento profesional. Sin embargo no,nos detenemos a analizar o asesorarnos que implica este trabajo cuantas horas vamos a invertir, que responsabilidades nos recaerán, bajo cuanta presión vamos a estar sometidos o cuanto va afectar nuestra vida personal, entonces cuando encontramos el trabajo que consideramos que es perfecto, resulta que no somos capaces de trabajar con tanta presión y vamos a estar abrumados. Para darle vuelta al trabajo soñado debemos sacar provecho de estas situaciones, como nos aconsejan estos autores permanece un tiempo apropiado, aprender cosas nuevas que nos generen una habilidad y experiencia que puede usarla positiva mente en futuros trabajos.
Hoy en día tenemos dificultades para conseguir un empleo que cubra las expectativas que siempre soñamos , vivimos en una constante como lo es, estudiar , prepararse, conseguir experiencia para llegar ahí, cuando te das cuenta que el resultado te decepciona o se tiende a fracasar debemos dejar atrás la decepción y modificar nuestra forma de pensar , aprovechando al máximo lo aprendido y darnos cuenta de cuánto tiempo podemos seguir o dejarlo ir en búsqueda de otro trabajo que nos proporcione mejores beneficios tanto económicos como en nuestra vida social. Lo importante es aprender , superar y observar donde nos equivocamos para así aprovechar al máximo las habilidades y decir tuve la oportunidad de aprender algo nuevo.
Si es un caso totalmente común y más en nuestro país Venezuela. Tal vez en otros Países las cosas pueden ser diferentes pero se dará la opinión con respecto a las experiencias que se vive aquí.
En este caso por ejemplo: la mayoría de los compañeros, se encuentran en las mismas condiciones que se encontró Caroline Kelso Winegeart en su primer empleo, a diferencia que ellos han cambiado de empleo más de una vez y las condiciones siguen siendo las mismas. Tal vez por la esperanza de conseguir algo mejor o por falta de orientación, o simplemente porque vivimos en Venezuela.
En Venezuela si trabajas para la empresa privada, el empleado profesional es violentamente bombardeado por trabajo que debes cubrir en un tiempo establecido, las empresas aprovechan hasta el último minuto de tus horas laborales para que produzcas como una máquina, y solo ganas méritos si eres el más eficaz y eficiente de todos, (te sientes más una máquina que una persona) cuando ya no te necesitan te desechan y consiguen a otro y ya. ¿Y eso está bien? Si por supuesto, si eres el gerente de dicha empresa, pero si eres ese empleado, no tendrás un espacio de armonía laboral y tal vez no podrás explotar todas tus capacidades por presión que se genera y eso sin contar que tus “Compañeros de trabajo”, son tus enemigos, lo que inevitablemente produce estrés laboral. Obvio que vas a querer salir corriendo a buscar otro empleo. En la Empresa Pública, la situación no es mejor que la anterior, los jefes o altos cargos direccionales se han acostumbrado a asignarles trabajos o tareas a los profesionales que no tienen que ver con su grado de instrucción, cosa que afecta psicológicamente al profesional recién graduado, porque lo desvaloriza, desmotiva o como dice el artículo lo decepciona. Para ascender de cargo, el empleado debe bajar la cabeza ante muchas personas, es decir humillarse para poder subir y al final hará lo mismo a otros; así que puede ser que este sistema nunca acabe. Lo bueno de la administración pública es, que las condiciones de estabilidad laboral son más sólidas, si no tienes ambiciones de un cargo mejor, podrás conseguir un espacio de armonía con tus compañeros, porque nadie te obliga a ser mejor que los otros.
El articulo dice “La gente espera cada vez más encontrar trabajos que les proporcionen no sólo sustento sino también estímulo, satisfacción emocional y una razón de ser.” Si pero aquí en este país, los venezolanos buscamos empleos que por lo menos nos proporcionen un sustento económico y no necesariamente debe ser el mejor salario, sino que nos alcance por lo menos para subsistir hasta que la situación mejore.
Las condiciones económicas del país, no permiten que podamos detenernos a reflexionar, antes de tomar otro empleo, como lo recomiendan en el artículo: “Para darle la vuelta a un trabajo de los sueños que no sale bien se necesita superar la decepción”. Una parte de los venezolanos, no superan la decepción y es por ello que vuelven a fracasar; y la otra parte, no cuentan con la fuerza suficiente para armarse de valor y presentar la carta de renuncia antes que perdamos las esperanzas de conseguir “el trabajo de nuestros sueños”.
Por eso es importante lo que dice Helene Lollis, presidenta de Pathbuilders, quien afirma que pudiéramos utilizar nuestro trabajo actual para desarrollar habilidades y contactos que podría servir como trampolín para una ocupación distinta.
Como dice Adele Scheele, autora de Skills for Success, de Los Ángeles. "Si el trabajo A no lo satisface y ese es el trabajo de sus sueños, no puede simplemente marcharse al trabajo B", porque "Podría llevarse su depresión consigo", y nunca se tocaría fondo, porque como se dijo anteriormente, la situación económica venezolana, lamentablemente, no ayudaría a favorecer el estado de ánimo del profesional, sino por el contrario lo acorralaría en un sin fin de deudas que lo llevaría a tomar el primer empleo para salir de la crisis financiera; es por ello que encontramos Abogados Taxistas, politólogos camioneros…
De igual forma se puede tomar lugar para reflexionar en dicho empleo, a medida que te encuentras con la realidad de que el mismo no era lo que esperabas.
No recomiendo para nada el conformismo, mientras te hundes en un estado de frustración, también puedes detenerte a pensar de manera profunda sobre lo que se podría haber hecho diferente, para que cuando se encuentre la oportunidad, ser más creativo a la hora de planificar las metas a futuro; Y es ahí donde verás que todo lo malo que pasó era para tu propio crecimiento profesional.
Si te parece has la lista de los pros y contras de las condiciones de ese nuevo empleo que quieres, pero hay veces que la felicidad laboral no la encontramos tan parecida a como la soñamos en un principio, sin embargo, no podemos adaptarnos a los lugares donde no estamos a gusto profesionalmente. Si te adaptas, te conformas y no progresas, aunque no lo veas.
Trabajamos arduamente preparándonos para encontrar “el trabajo de nuestros sueños” y lo logramos, que decepcionante seria darnos cuenta que en realidad no lo es, un problema más común de lo que la mayoría de nosotros creemos o estamos dispuestos a darnos cuenta antes de que sea demasiado tarde. Señala Helene Lollis la presidenta de una importante consultoría de liderazgo en Atlanta, que antes de dar un cambio drástico del punto en el estamos al que queremos llegar, es superar dicha decepción dejando a un lado la negatividad y tomando como punto a favor todos los logros que hemos obtenido en ese trabajo y preguntarnos ¿A dónde podemos ir y dar un cambio de 180º? En ese caso lo ideal es no permitirnos caer en la frustración sino tomarlo como un trampolín para tener un punto de comparación y en ese camino ir encontrando experiencias beneficiosas y satisfactorias, laboral y personalmente, es decir, no todo los errores son malos sino que resultan como motivadores para generar un cambio y seguir en la búsqueda del sitio en el que conseguimos estabilidad teniendo la seguridad que no dejamos lo sueños a un lado, ya que lo más triste seria que nos convirtamos en el cementerio de las frases que nunca se dijeron, los inventos que no conoceremos, las cancines que no se cantaron y los sueños no realizados, que podrían no solo aportar mucho a nuestras vidas sino al mundo. Tener claro el panorama que nos espera al alcanzar el trabajo de nuestros sueños seria un interesante medio de prevención contra la decepción laboral. Conocer los retos con los que nos encontraremos, lo que debemos sacrificar, cuánto tiempo invertiremos en ellos, y demás factores que influyan en visualizar si ese trabajo es el medio soñado. O bien podríamos simplemente evitar decepcionarnos de nuestro empleo haciendo una lista de pros y contras de todas las características de un trabajo que afectaran nuestra felicidad, como sugiere Cheryl Heisler, De todas nuestras experiencias aunque no nos gusten nos quedan lecciones que queriendo o no nos transforman. Decepcionarnos no es un fracaso es una oportunidad que nos abre los ojos al cambio. Bárbara Vanegas, CI: 24783523 Deisy A. Montilla, CI: 24775984 Selena Gomez, CI: 24.782.596 Yefferson Caceres, CI: 25.602.230
Comúnmente muchas personas son influenciadas por su entorno para elegir la preparación que promoverá el trabajo de sus sueños, es por ello que se deben tomar en cuenta muchos factores antes de tomar esta decisión como: las experiencias en ese campo laboral, las cualidades rutinarias y las características sobre las ventajas y desventajas de ese trabajo que afectarán la satisfacción que esperan sin estar enfocados solo en el sustento.
ResponderEliminarSin embargo al invertir tiempo, costo, esfuerzo y dedicación para lograr el contrato soñado se encuentran con decepciones inesperadas al constatar una inconformidad sobre el verdadero desempeño del cargo, las cuales se deben superar para aprovechar la experiencia, los estudios, las habilidades y contactos obtenidos, como base hacia el logro del éxito emocional y profesional.
• Delgado Liza C.I: 24.148.307
• Ramirez Luzfed C.I: 16.409.374
• Ramirez María C.I: 25.633.075
• Romero Loren C.I: 18.762.881
• Romero Yoel C.I: 21.221.340
Hoy en día existen muchas posibilidades de que los objetivos profesionales cambien de nuestra vida de estudiantes al momento de ejercer, en las horas laborales puede que no nos sintamos cómodos o a gusto pero no por ello quiere decir que hemos fracasado solo debemos verlo como que tenemos las oportunidades de saber escoger y decidir en realidad que es lo que nos gusta en el ámbito laboral para trabajar con satisfacción y a la misma vez recibir nuestra remuneración económica.
ResponderEliminarY si nos damos cuenta que no estamos cómodos igual debemos mantenernos para desarrollar mas habilidades y definir en que campo laboral nos gusta estar, y no renunciar de una vez sin tener algo claro porque si no sabemos en que desempeñarnos siempre estaríamos en una inestabilidad probando que nos gusta y así pasarían y renunciaríamos a muchos empleos.
Criollo M. Oskarly R.
Diaz R. Andrea N.
Perez F. Wilkin Y.
Rey V. Maria G.
Valbuena A. Luis A.
Villate M. Emelly M.
Sin duda, esta es la realidad que viven muchas personas, quienes no se sienten contentos con su trabajo así estén en la rama que escogieron y en la cual se han especializado universitariamente y al ejercerla profesionalmente descubren simplemente que no les gusta.
ResponderEliminarConfucio dijo: "Si amas lo que haces, nunca será un trabajo" y esa debería ser la constante de todos, pero si llegamos al trabajo soñado y resulta ser un fracaso que podemos hacer? Lo que nos enseña Caroline Winegeart en su vivencia es que hay que buscar el lado beneficioso de esta decepción ; fortalecernos y ver de qué manera ese trabajo en el que estamos se puede convertir en un escalón para encontrar algo donde nos sintamos plenos; o bien, empezar a agradecer la oportunidad que se tiene en ese momento, y no abandonar rápidamente esa carrera que se esfuma, sino desarrollar más habilidades que serán parte de nuestras experiencias para un futuro.
*Flores Diaz, Lynda Lisset
*Contreras Navea, Lisbeth
*Medina Saenz, Oriana
*Zambrano Colmenares, Maylin
Un tema familiar para muchos y de gran importancia hoy en día, ya que estamos hablando del grado de conformidad que se tiene con el trabajo soñado. Se puede tener el trabajo soñado, pero a su vez influyen una infinidad de factores que pueden decepcionarte del mismo, como por ejemplo: ¿realmente le apasiona?, impera un buen clima laboral, puede innovar y aportar nuevas ideas, la empresa valora y destaca sus logros, existe una buena remuneración, líderes que motivan, posibilidades de ascenso y muchos más.
ResponderEliminarSe tiene el trabajo soñado pero a su vez se siente infeliz e inconforme con el, lo consideran una carga y un deber que cumplir sin mayores motivaciones. Estos sucede principalmente por la ausencia de los factores anteriormente nombrados. El desempeño de los empleados es fundamental para lograr día a día las metas de la organización, ya que ellos son el principal elemento de la empresa. Alguien que no se sienta a gusto en su empresa buscará ese trabajo soñado en otra que le brinde la satisfacción necesaria de la cual dependerá su productividad en ella. Sin embargo la satisfacción laboral no es sólo responsabilidad de la empresa, también va a depender de la participación activa del trabajador, su buena relación con sus compañeros y buena disposición.
La mayoría de las personas desde que son muy jóvenes piensan en el trabajo que más le gustaría desempeñar, ya sea porque les dan buenos beneficios o por su satisfacción emocional, sin saber que al momento de ejecutar el trabajo puedan o no encontrar lo esperado o anhelado, sin embargo hoy en día ciertas decisiones nos lleva a lugares equivocados a tal punto de sentir el estrés y la carga del trabajo, frecuentemente realizándolo sin preocuparnos por el desempeño sino pensando en agilizar cada cosa para salir de nuestra actividad, dándonos cuenta de que esa actividad no nos llevará a ningún lado. Pero la mejor opción no es salir corriendo y no volver más, o levantarse al día siguiente y decir no voy a trabajar hoy porque simplemente no me gusta, lo mejor es tomarse unos días para pensar y reflexionar que fue lo que paso, y que se debe hacer ahora, observando detenidamente en que fallamos, en que nos equivocamos, enfrentar la realidad y aprovechar al máximo nuestras habilidades, preguntarnos siempre hacia dónde queremos ir y qué es lo que realmente debemos hacer. Como dice el artículo: “los fracasos inesperados pueden ser beneficiosos si sacuden a la gente y les llevan a pensar de forma distinta”.
ResponderEliminarGonzález L., Noreska Y. C.I. V.- 25.703.416
Hernández R., Danaris Y. C.I. V.- 21.419.018
Millán R., Anna C. C.I. V.- 24.745.636
Ron G. Leyda G. C.I. V.- 15.242.649
Toloza B., Yosel A. C.I. V.- 24.355.149
Velásquez G., Wladimir E. C.I. V.- 24.693.533
Aunque resulte extraordinario, esto ocurre con más frecuencia de lo que pensamos. Hoy a muchos jóvenes les inculcan la idea del "trabajo de sus sueños". Cada vez más gente espera encontrar un empleo que no sólo le ayude a ganarse la vida, sino que suponga un estímulo y cubra algunos aspectos emocionales.
ResponderEliminarPara convertir un empleo que ha resultado un sueño frustrado en un triunfo hay que vencer la decepción, ver dónde nos hemos equivocado y sacar el máximo partido a nuestras habilidades. "Una buena estrategia es preguntarse hacia dónde queremos ir sin tener que plantearnos un giro radical", señala Helene Lollis, presidenta de la consultora Pathbuilders.
El cambio inteligente Eso implica, incluso, aprovechar nuestro actual trabajo para desarrollar nuestras capacidades y contactos que pueden ayudarnos a encontrar otro puesto. A Winegeart siempre le gustó utilizar las redes sociales, así que hizo que se convirtieran en un aspecto fundamental de su actividad. Esto le ayudó a encontrar un nuevo empleo que consistía en crear un departamento de redes sociales en una agencia más pequeña.
Su experiencia le llevó, años después, a dejar el mundo de la publicidad y a convertirse en directora de operaciones de IWearYourShirt.com, una empresa de márketing. Ahora Winegeart dirige su propio negocio de diseño web, MadeVibrant.com.
Los fracasos inesperados pueden ser beneficiosos cuando nos inducen a modificar nuestra forma de pensar, según un estudio de la publicación Social Psychology. Ashley Stahl dedicó toda su formación a prepararse para el trabajo de sus sueños: la seguridad nacional. Se licenció en relaciones internacionales, aprendió árabe y se trasladó a Washington, donde realizó más de 90 pruebas. A los 23 años, consiguió un empleo con un contratista de defensa para dirigir un programa para el Pentágono: "Estaba emocionada con esta oportunidad; me parecía increíble, un sueño hecho realidad".
Esta situación es contemplada más veces de las que un ser humano se pueda imaginar, desde jóvenes con frecuencia ocurre, que la familia o personas cercanas inculquen pensamientos de cómo debe ser el trabajo de su sueños, muchas veces lo hacen pensando en la remuneración obtenida por el mismo y otras por cubrir aspectos emocionales. ¿Ahora bien, que sucede cuando este sueño no es la realidad que se ha venido gestando? Existen muchas expectativas al responder esta interrogante, pero la más adecuada seria la insatisfacción que surge cuando no se cumplen las expectativas sobre lo deseado, con tan anhelado trabajo. Sin embargo se puede convertir este fracaso en una oportunidad, siempre y cuando se acepte la realidad que se está viviendo, y empiece a desarrollar las capacidades que se tienen como ser humano, adaptándolas a las tareas asignadas en el trabajo, esto genera tranquilidad y seguridad, de que las cosas que se están realizando se cumplan dentro de los parámetros establecidos, trayendo como resultado un entorno favorable en el ámbito laboral y a su vez satisfacción personal.
- Da Silva Lennis C.I: 9.241.301
- Jimenez Elka C.I: 9.460.997
- Ortega Yeimi C.I: 21.416.628
- Rodriguez Yesenia C.I: 18.790.521
- Rodriguez Carlos C.I: 20.368.983
- Perez Jehaset C.I: 20.627.877
- Zamudio Daniela C.I: 20.627.877
Hay quien espera encontrar un trabajo que suponga un estímulo y cubra algunos aspectos emocionales, pero incluso tener “el trabajo de sus sueños” puede decepcionar a muchas personas, ya que se sienten abrumadas por la cantidad de tiempo que deben dedicarle a dicho trabajo y les consume emocionalmente, al verse atrapados en un sinfín de responsabilidades y ver reducido su tiempo para dedicarle a cosas personales. Pero antes de tomar una decisión arriesgada, como lo es salir corriendo y dejar tirado el trabajo sin mirar atrás, se puede tomar las cosas son clama y mirar que aspectos se pueden mejorar para reinventar el trabajo y así enriquecer el tiempo que se le dedica y recuperar tiempo y espacio para realizar actividades que le llenen emocionalmente, el equilibrio entre la vida personal y laboral. Si decide retirarse del trabajo, debe aprovechar el trabajo actual para desarrollar aptitudes y capacidades que puedan ser fundamentales en un nuevo puesto de trabajo, hacer una lista de pros y contras de todas las características que afectarán su felicidad, que el fracaso le sirva de experiencia para mejorar aspectos negativos y resaltar los positivos.
ResponderEliminarArenas Nelsy
Colmenares Esneider
Delgado Leonardo
Gutierrez Norma
Gutierrez Lizmar
Rangel Cheriberth
Sanchez Endrila
Comúnmente deseamos encontrar el trabajo de nuestros sueños, que nos proporciona estabilidad, prestigio experiencias y conocimiento profesional. Sin embargo no,nos detenemos a analizar o asesorarnos que implica este trabajo cuantas horas vamos a invertir, que responsabilidades nos recaerán, bajo cuanta presión vamos a estar sometidos o cuanto va afectar nuestra vida personal, entonces cuando encontramos el trabajo que consideramos que es perfecto, resulta que no somos capaces de trabajar con tanta presión y vamos a estar abrumados.
ResponderEliminarPara darle vuelta al trabajo soñado debemos sacar provecho de estas situaciones, como nos aconsejan estos autores permanece un tiempo apropiado, aprender cosas nuevas que nos generen una habilidad y experiencia que puede usarla positiva mente en futuros trabajos.
Mary Luz Mojica C.I: V-15.438.225
Pinzón Thais C.I: V-10.175.023
Rodrìguez Vanessa C.I: V-17.492.742
Valero Gleyxi C.I: V-18.564.387
Hoy en día tenemos dificultades para conseguir un empleo que cubra las expectativas que siempre soñamos , vivimos en una constante como lo es, estudiar , prepararse, conseguir experiencia para llegar ahí, cuando te das cuenta que el resultado te decepciona o se tiende a fracasar debemos dejar atrás la decepción y modificar nuestra forma de pensar , aprovechando al máximo lo aprendido y darnos cuenta de cuánto tiempo podemos seguir o dejarlo ir en búsqueda de otro trabajo que nos proporcione mejores beneficios tanto económicos como en nuestra vida social. Lo importante es aprender , superar y observar donde nos equivocamos para así aprovechar al máximo las habilidades y decir tuve la oportunidad de aprender algo nuevo.
ResponderEliminarAguilera Emirse. CI: 19.437.951
Cornejo Henderson. CI: 23.540.978
Garzón Greici. CI: 23.095.996
Gómez Mércy. CI: 21.220.650
Maizo Narezka. CI: 12.112.720
Pareles Oswaldo. CI: 19.777.399
Zambrano Ricardo. CI: 21.776.438
Si es un caso totalmente común y más en nuestro país Venezuela. Tal vez en otros Países las cosas pueden ser diferentes pero se dará la opinión con respecto a las experiencias que se vive aquí.
ResponderEliminarEn este caso por ejemplo: la mayoría de los compañeros, se encuentran en las mismas condiciones que se encontró Caroline Kelso Winegeart en su primer empleo, a diferencia que ellos han cambiado de empleo más de una vez y las condiciones siguen siendo las mismas. Tal vez por la esperanza de conseguir algo mejor o por falta de orientación, o simplemente porque vivimos en Venezuela.
En Venezuela si trabajas para la empresa privada, el empleado profesional es violentamente bombardeado por trabajo que debes cubrir en un tiempo establecido, las empresas aprovechan hasta el último minuto de tus horas laborales para que produzcas como una máquina, y solo ganas méritos si eres el más eficaz y eficiente de todos, (te sientes más una máquina que una persona) cuando ya no te necesitan te desechan y consiguen a otro y ya. ¿Y eso está bien? Si por supuesto, si eres el gerente de dicha empresa, pero si eres ese empleado, no tendrás un espacio de armonía laboral y tal vez no podrás explotar todas tus capacidades por presión que se genera y eso sin contar que tus “Compañeros de trabajo”, son tus enemigos, lo que inevitablemente produce estrés laboral. Obvio que vas a querer salir corriendo a buscar otro empleo.
En la Empresa Pública, la situación no es mejor que la anterior, los jefes o altos cargos direccionales se han acostumbrado a asignarles trabajos o tareas a los profesionales que no tienen que ver con su grado de instrucción, cosa que afecta psicológicamente al profesional recién graduado, porque lo desvaloriza, desmotiva o como dice el artículo lo decepciona. Para ascender de cargo, el empleado debe bajar la cabeza ante muchas personas, es decir humillarse para poder subir y al final hará lo mismo a otros; así que puede ser que este sistema nunca acabe. Lo bueno de la administración pública es, que las condiciones de estabilidad laboral son más sólidas, si no tienes ambiciones de un cargo mejor, podrás conseguir un espacio de armonía con tus compañeros, porque nadie te obliga a ser mejor que los otros.
El articulo dice “La gente espera cada vez más encontrar trabajos que les proporcionen no sólo sustento sino también estímulo, satisfacción emocional y una razón de ser.” Si pero aquí en este país, los venezolanos buscamos empleos que por lo menos nos proporcionen un sustento económico y no necesariamente debe ser el mejor salario, sino que nos alcance por lo menos para subsistir hasta que la situación mejore.
Las condiciones económicas del país, no permiten que podamos detenernos a reflexionar, antes de tomar otro empleo, como lo recomiendan en el artículo: “Para darle la vuelta a un trabajo de los sueños que no sale bien se necesita superar la decepción”. Una parte de los venezolanos, no superan la decepción y es por ello que vuelven a fracasar; y la otra parte, no cuentan con la fuerza suficiente para armarse de valor y presentar la carta de renuncia antes que perdamos las esperanzas de conseguir “el trabajo de nuestros sueños”.
Por eso es importante lo que dice Helene Lollis, presidenta de Pathbuilders, quien afirma que pudiéramos utilizar nuestro trabajo actual para desarrollar habilidades y contactos que podría servir como trampolín para una ocupación distinta.
ResponderEliminarComo dice Adele Scheele, autora de Skills for Success, de Los Ángeles. "Si el trabajo A no lo satisface y ese es el trabajo de sus sueños, no puede simplemente marcharse al trabajo B", porque "Podría llevarse su depresión consigo", y nunca se tocaría fondo, porque como se dijo anteriormente, la situación económica venezolana, lamentablemente, no ayudaría a favorecer el estado de ánimo del profesional, sino por el contrario lo acorralaría en un sin fin de deudas que lo llevaría a tomar el primer empleo para salir de la crisis financiera; es por ello que encontramos Abogados Taxistas, politólogos camioneros…
De igual forma se puede tomar lugar para reflexionar en dicho empleo, a medida que te encuentras con la realidad de que el mismo no era lo que esperabas.
No recomiendo para nada el conformismo, mientras te hundes en un estado de frustración, también puedes detenerte a pensar de manera profunda sobre lo que se podría haber hecho diferente, para que cuando se encuentre la oportunidad, ser más creativo a la hora de planificar las metas a futuro; Y es ahí donde verás que todo lo malo que pasó era para tu propio crecimiento profesional.
Si te parece has la lista de los pros y contras de las condiciones de ese nuevo empleo que quieres, pero hay veces que la felicidad laboral no la encontramos tan parecida a como la soñamos en un principio, sin embargo, no podemos adaptarnos a los lugares donde no estamos a gusto profesionalmente. Si te adaptas, te conformas y no progresas, aunque no lo veas.
Katherine Valeria Arenas Pernia C.I: V-24.149.411
Jose Francisco Contreras Contreras C.I: V-25.495.647
Alexia Monzerat Rosales Rodriguez C.I: V-25.497.431
Yuleisy Andreina Ruiz Ruiz C.I: V-20.122.183
Trabajamos arduamente preparándonos para encontrar “el trabajo de nuestros sueños” y lo logramos, que decepcionante seria darnos cuenta que en realidad no lo es, un problema más común de lo que la mayoría de nosotros creemos o estamos dispuestos a darnos cuenta antes de que sea demasiado tarde.
ResponderEliminarSeñala Helene Lollis la presidenta de una importante consultoría de liderazgo en Atlanta, que antes de dar un cambio drástico del punto en el estamos al que queremos llegar, es superar dicha decepción dejando a un lado la negatividad y tomando como punto a favor todos los logros que hemos obtenido en ese trabajo y preguntarnos ¿A dónde podemos ir y dar un cambio de 180º?
En ese caso lo ideal es no permitirnos caer en la frustración sino tomarlo como un trampolín para tener un punto de comparación y en ese camino ir encontrando experiencias beneficiosas y satisfactorias, laboral y personalmente, es decir, no todo los errores son malos sino que resultan como motivadores para generar un cambio y seguir en la búsqueda del sitio en el que conseguimos estabilidad teniendo la seguridad que no dejamos lo sueños a un lado, ya que lo más triste seria que nos convirtamos en el cementerio de las frases que nunca se dijeron, los inventos que no conoceremos, las cancines que no se cantaron y los sueños no realizados, que podrían no solo aportar mucho a nuestras vidas sino al mundo.
Tener claro el panorama que nos espera al alcanzar el trabajo de nuestros sueños seria un interesante medio de prevención contra la decepción laboral. Conocer los retos con los que nos encontraremos, lo que debemos sacrificar, cuánto tiempo invertiremos en ellos, y demás factores que influyan en visualizar si ese trabajo es el medio soñado. O bien podríamos simplemente evitar decepcionarnos de nuestro empleo haciendo una lista de pros y contras de todas las características de un trabajo que afectaran nuestra felicidad, como sugiere Cheryl Heisler,
De todas nuestras experiencias aunque no nos gusten nos quedan lecciones que queriendo o no nos transforman. Decepcionarnos no es un fracaso es una oportunidad que nos abre los ojos al cambio.
Bárbara Vanegas, CI: 24783523
Deisy A. Montilla, CI: 24775984
Selena Gomez, CI: 24.782.596
Yefferson Caceres, CI: 25.602.230